agosto 07, 2025

🔴 Conciliación Laboral. Lo que nadie te dice...

 

🔴 La Traición Silenciosa en la Conciliación Laboral

Enrique Rueda

🧨 El conciliador no es tu aliado… y nadie te lo advierte
🎭 Muchos entran confiados pero… salen perdiendo, ya que hay muchas cosas que nadie te dice sobre la “Conciliación Laboral” que te podrían costarte tu liquidación. Empecemos por tratar de entender que “El Conciliador” ⚖️ no es tu abogado, ni tu defensor. Para cumplir métricas, pareciera que en la gran mayoría de los casos busca más el lograr que firmen convenio y se vayan.
Pero entremos en materia…


⚠️ 1. Su función es cerrar expedientes, no hacer justicia laboral

Aunque suene duro, el objetivo institucional del Centro de Conciliación es despresurizar el sistema judicial laboral, evitar juicios, y cerrar el mayor número de asuntos.

💬 Dicho en palabras claras:

El Conciliador quiere que ambas partes firmen un convenio que dé por terminado el procedimiento, que no siempre signifique que se haya solucionado realmente el conflicto, el propósito es no permitir que el mismo llegue al sistema judicial. Seamos realistas: su prioridad no es que el trabajador reciba lo justo, sino lo práctico.

🔍 Ejemplo real:

Un trabajador calcula $42,000 de liquidación. El patrón ofrece $15,000. El conciliador no protege derechos y sólo dice:

“¿Y si lo cierran en 25 para evitarse el juicio?”

Eso no es justicia, es trámite.


⚠️ 2. No tiene poder para obligar al patrón a pagar lo justo

Muchos trabajadores entran a la audiencia creyendo que el conciliador puede ordenar un pago justo, como si fuera juez.

Error:

El conciliador no impone sanciones ni cantidades. Su papel es meramente facilitador del diálogo.

💬 Traducción práctica:

Aunque pudiese percibir que la propuesta de la parte patronal implicaría renuncia de derechos, no lo van a detener. Simplemente podrá “sugerir” reconsiderar los números para llegar a un acuerdo, pero si el patrón decide ofrecer una miseria, se va a quedar en eso.


⚠️ 3. Está obligado a ser imparcial (aunque tú seas la parte débil)

El conciliador no puede “defender” a ninguna de las partes. No puede tomar postura por ti, aunque el patrón mienta o intente presionar.

💬 Lo que significa que:

Si el patrón dice que sí te pagó (aunque sea falso), el conciliador no va a discutirlo. Dirá:
“Eso lo tendrán que ver en juicio si no se ponen de acuerdo”.

📌 Esto desarma a los trabajadores que llegan solos, esperando que “el gobierno los defienda”.


⚠️ 4. Presionan al trabajador para que acepte lo que hay

En la práctica, aunque no lo acepten, los conciliadores sutilmente presionan más al trabajador que al patrón.

¿Por qué?

Porque al patrón le basta con decir: “No tengo dinero, no puedo pagar más”.

Al trabajador, en cambio, lo persuaden con frases como:

“Si no aceptas hoy, vas a tener que meter demanda y eso tarda años.”

“Los sistemas judiciales son muy estrictos.”

“Podrías perderlo todo si vas a juicio.”

🎯 Todo eso es presión emocional disfrazada de realismo.


⚠️ 5. No validan si lo que se está firmando es justo o legalmente correcto

Hay patrones que ofrecen cantidades que no incluyen compensación por el despido, ni pago de antigüedad aún en despido, finiquitos calculados sobre salarios que no corresponden a la realidad, que inciden en el monto de vacaciones, prima vacacional, aguinaldo… y el convenio se firma.
El conciliador no revisa si el monto corresponde con la realidad.

💬 Esto significa que:

El conciliador valida que las partes firmen por voluntad, no que el pago sea justo.
❗️Es perfectamente posible cerrar una conciliación con un pago del 30% de lo que legalmente correspondería.


⚠️ 6. Te recomiendan no llevar abogado… y eso te puede costar todo
Una de las frases más peligrosas que se escuchan en los Centros de Conciliación es:

“No es necesario que traigas abogado. Es un trámite sencillo.”

🎭 Nada más falso. La conciliación es una negociación de alto riesgo, no una simple plática.

💥 Sin un abogado o defensor laboral:

  • No sabes cuánto te toca realmente.
  • No sabes qué documentos no debes firmar.
  • No sabes detectar trampas o simulaciones.
  • No tienes a nadie que te oriente si te presionan.
  • No puedes valorar si el convenio es legalmente válido.

🧨 En resumen: puedes salir con una firma... y sin un peso.

👉 No necesitas un abogado caro, pero sí a alguien que sí sepa conciliar dentro de un entorno legal.


🧠 Conclusión

👉 El conciliador no es tu enemigo, pero tampoco es tu defensor.
Es un facilitador con metas estadísticas y sin herramientas para protegerte si llegas en desventaja.

🔑 La protección real viene de:

• Tu cálculo claro

• Tu estrategia de presión

• Tu evidencia

• Y ojalá, tu acompañamiento legal


✍️ Autor: Enrique Rueda Santillán

🧠 Edición y estilo con IA